"Las horas contigo"

Uno de los momentos más confusos y amargos que he vivido, ha sido la muerte de mi abuelo. Ver tan frágil a ese ser que solía parecer fuerte e inquebrantable. Aquel con el que platicaba y ahora estaba ausente, con la mirada perdida, la voz muda, balbuceante y el cuerpo inmóvil. Como si su cuerpo siguiera aquí, pero no su alma. Esto es prácticamente lo que vive Ema en “Las horas contigo” al ver a su Abu. Esta película habla del amor inconmensurable y gratuito que existe entre los abuelos y sus nietos, entre los padres y sus hijos. Un amor que no pide nada a cambio, que no se explica de donde proviene o por lo menos yo no le encuentro explicación.

Otro tema del cuál podemos tratar al hablar de esta película, es el de la familia tradicional mexicana. Las familias mexicanas solían mantener gran devoción por la religión católica, algo que se ha ido diluyendo de las tradiciones familiares con el paso de las generaciones. En parte, ésto se debe a la rigidez, que yo considero excesiva, por parte de las autoridades religiosas. Claro que las leyes divinas de las que habla la religión católica encuentran su fundamento en la ley natural, que lo rige todo de manera objetiva, pero debería haber mayor aprecio por la imperfección humana, eso de andar negándola (la imperfección humana) y suponer que existen personas inamovibles en sus creencias y en sus principios morales, nadie se lo cree ahora. Entonces porqué castigar a aquellos que no cometen una pena grave con el desprecio y rechazo de los demás creyentes y de la misma iglesia. Estos temas los trata muy bien Catalina Aguilar Mastretta, directora de “Las horas contigo”, junto a las grandes actuaciones de Cassandra Ciangherotti, Isela Vega, María Rojo, Arcelia Ramírez y más actores que le dan vida a esta emotiva y excelente cinta.